lunes, 7 de mayo de 2012

NSd20 - Gran genérico... con detalles.

Hace bastantes años, cuando era novato en esto de Internet, comencé a buscar cosas roleras. Recuerdo que por la mula (ejem...) encontré la primera edición de L5A, lo cual, con los años, me condujo a comprarme la 3ª edición, ahora dudo en si comprarme la cuarta (la duda no es si sí o si no, si no cuando) y también a conseguir, de segunda mano, la 1ª y la Senda del Cangrejo. También la mula me regaló varios suplementos de Warhammer, el Juego de Rol. Que luego me compré. Así que eso de que las descargas bajan ventas... Bueno, que me lío. Era yo un novato en estas cosas de Internet, repito, y descubrí algunos extraños juegos. Eran genéricos. Sin ambientación. Que valían para casi cualquier cosa.

¿Un juego sin ambientación? ¡Brujería!
La cosa es que no recuerdo cual fue le primer juego genérico que encontré. Posiblemente fuera Zombie: AFMBE, la vieja edición. Quizás fuera Rápido y Fácil. Pero no se si fue el primero que encontré, pero seguro que el que más me caló fue NSd20. A mi forma de ver, este juego adaptaba la mecánica de D&D (aunque por esa época ya tenía más o menos claro que era eso del 'OGL', ya que tenía el juego de Juego de Tronos, el juego IKEA, que también usaba d20) de forma genérica, para crear cualquier tipo de PJ para cualquier tipo de ambientación. El juego en sí me parecía bastante bien hecho. Paso aquí a resumir el por qué:
  • Es un juego sólido. Tienes suficiente material para llevar una partida en la prehistoria o un Space Opera. A tu gusto.
  • La magia mola. Se aleja del sistema 'hechizos que se olvidan'.
  • El combate, como todo D&D, es bastante activo, pero además aquí se hacía más realista con lo de los niveles de daño.
  • La riqueza pasa a ser una especie de atributo, mas sencillo que ir contando monedita. 
  • Pero, sobre todo, las ambientaciones del final. Estas ambientaciones me llamaron a sobremanera. Ahora paso a contarlas:
  1. Una era de fantasía oscura, bastante heavy, con una raza, una especie de superhombres (casi parecían elfos, pero a lo malvado, cruel, superiores y racistas, y además con el control casi total del mundo) dominando el continente y pequeños grupos de resistencia, ya fuera entre las castas inferiores, los enenmigos de ese imperio (¡Artoi! Así se llamaban, los Artoi) o algunos artoi que iban contra el propio imperio (aunque no tienen por que ser buenos). También podías ser Artoi y dedicarte a ser el malo, claramente. 
  2. Otra era de horror contemporáneo. Los humanos realmente somos seres casi-divinos, con poderes para cambiar el mundo a nuestro antojo. Pero una raza alienígena consiguió esclavizar a los humanos y encerrarlos en una especie de cárceles mentales, algo así como Matrix. Los hombres pasamos a tener estas vidas, normales y corrientes, siempre controlados por estos seres. Los PJ eran humanos que, por una cosa u otra, descubrían la verdad y pasaban a formar parte de una especie de grupos terroristas para combatir a estos seres. Estos humanos tenían magia a su alcance, que eran retazos de su verdadero poder. Aparte habían varios seres extraños (como los jugadores de ajedrez) que eran entes que no se decantaban por ningún bando, o simplemente eso no les importaba. A mi fue la que más me sorprendió. 
  3. Finalmente había una pulp-futurista, en Neo Hong-Kong. El mundo estaba en plena 3ª Guerra Mundial, pero eso pasaba FUERA de Neo Hong-Kong. Esa ciudad, enorme, una verdadera megalópolis que ha crecido tanto a lo alto como a lo ancho, era 'la Casablanca del futuro', donde se daba un aire cyberpunk (grandes avances y grandes desigualdades, mucho cachivache electronico, implantes bionicos) junto con algo más futurista (robtos, mutantes...) y toques pulp (grandes señores del crimen, muchos esbirros, ¡incluso tios que iban a puñetazo limpio!). Hasta había nazis. Nazis de los del siglo pasado. En el futuro. Es decir, la caña.
En general este me pareció un gran juego. Solo le veía algún que otro fallo. Uno, que era demasiado complejo, como todo el d20 a partir de D&D 3.x. Muchas tiradas, muchas cosas, etc. Otra, la ENORME cantidad de dotes de un PJ. Es decir, un PJ podía empezar con 6 o 7 dotes, lo cual era un poco heavy... Y creo que nada más.

En general NSd20 me parece un enorme juego, y con muchísimas posibilidades. Con algunos defectos, pero como todos los juegos. 

Bueno, espero que os haya gustado, ¡nos leemos!

1 comentario:

  1. Pues con tu reseña yo le daría una oportunidad... si no fuera porque tengo tantos sistemas D20 en la estantería que empiezo a hacerme un verdadero lío.

    ¡Un saludete!

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